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7 buenos hábitos mañaneros


A veces sucede que despertamos de mal genio por las mañanas y esto puede ser causado por diferentes motivos. Ya sea que no seamos personas diurnas o tengamos muchas preocupaciones en la mente, queda en nuestras manos reducir las situaciones de disgusto.

Por eso es de suma importancia crear buenos hábitos a la hora de empezar el día. A continuación te presentamos siete buenos hábitos mañaneros.

1. Levantarse temprano

No hay mejor forma de empezar el día, que empezando antes. Y es que despertar temprano nos ayuda a ser más productivos y a sentir menos estrés durante el día. Quince minutos pueden hacer la diferencia. Y no solo es importante a qué hora nos levantamos sino cómo lo hacemos.

Hay que buscar la manera de despertar tranquilamente de nuestro estado de reposo. Una buena forma de lograrlo es ajustar la alarma de nuestro celular para que no sea tan agresiva y nos altere desde temprano. Y si eres de sueño pesado, solo debes subir el volumen de la melodía que escojas; procura que sean sonidos de la naturaleza para sentir menos estrés.

2. Meditar

Para poder levantarnos relajados es importante tener un tiempo de meditación y hacer estiramientos. Con 5 minutos más que dediquemos en nuestra mañana podremos amanecer recargados y llenos de energía.

Es muy importante no pensar en los pendientes que tengamos para el día para no empezar el día con estrés y agitados. Relaja la mente y sé consciente de tu cuerpo y de lo que te rodea.

Despierta tus sentidos del tacto, oído y olfato para estar en sintonía con tu mundo desde temprano. Una vez que termines estarás con más energía y con mayor disposición para las labores del día.

3. Tomar un vaso de agua

El agua es un elementos imprescindible que conforma nuestro cuerpo y que representa el 75% de nuestros músculos, 90% del cerebro, 22% de nuestros huesos y 83% de nuestra sangre. No tomar agua es algo negativo para nuestra productividad.

Hacer el hábito de tomar agua puede representar grandes beneficios para nuestra salud como una piel más sana, bajar de peso, tener un mejor rendimiento físico, y eliminar las toxinas.

Tener a la manos una jarra con agua es una gran idea y es importante tomar por lo menos un vaso de agua en ayunas. Si te resulta difícil tomarla, agrega un poco de limón puede agarrarle gusto. Recuerda que hay que tomar alrededor de 2 litros de agua durante el día.

4. Ejercitarse

Quizás pensemos que hacer algún ejercicio nos puede agotar antes de empezar la jornada laboral, pero realizar una actividad física por la mañana mejora el flujo sanguíneo al cerebro, que resultará en mayor funcionalidad y desempeño al momento de realizar nuestras actividades diarias.

Dependiendo del tiempo que tengamos para prepararnos por la mañana, podemos ampliar nuestro tiempo de meditación con estiramientos, salir a correr o caminar a un parque, bailar o realizar sets de sentadillas y/o abdominales.

5. Desayunar

Un mal hábito que muchos podemos realizar es saltarnos el desayuno por la prisa de llegar al trabajo. Es importante dejar este mal hábito de tomar solo café o té y empecemos con algo más en el estómago para estar más enérgicos desde la mañana. Tener un desayuno más completo te aportará mayores nutrientes y estarás de mejor humor (para los que se ponen de malas si están con el estómago vacío).

6. Prepararse para el trabajo

Tomar demasiadas decisiones estresantes en la mañana puede drenar nuestra energía. Decicir qué vestir es una de ellas. Hay quienes que tienen la ventaja de llevar uniforme pero a otros podrá tomarle mucho más tiempo en escoger su conjunto del día. Una buena forma de hacer más eficiente esta tarea es preparar el conjunto la noche anterior y tenerla en un gancho a la mano.

También es cierto que hay que prepararnos para la jornada laboral pero no por eso hay que empezar a revisar los pendientes desde muy temprano. Checar el correo, hacer una llamada a un cliente o empezar a planificar actividades reduce nuestra productividad a largo plazo.

Hay que tener un tiempo de preparación mental, relajarnos y designar tiempos para nuestras actividades después de una hora de entrar a trabajar.

7. Empezar con las tareas más difíciles

Es bueno asignar las tareas difíciles para las mañanas ya que es cuando tenemos más energía. Conforme transcurre la jornada es que nos agotamos. Por eso, termina las tareas pesadas temprano.

Un buen consejo para mantenernos productivos por más tiempo es tomar jugo de arándanos ya que aportan muchos nutrientes, antioxidantes y mantienen sano el cerebro por su contenido de flavonoides que potencian la memoria, mejoran el aprendizaje y las funciones cognitivas.

Hay quienes aman la mañana y hay quienes preferirán estar más tiempo en cama. Aún así estos consejos son una guía para empezar el día y ser más productivos. Hay que adaptar estos puntos a nuestra rutina y horarios pero es importante seguirlos todos.

Fuente: lamoradasimple.com


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